La semana pasada presentábamos la exposición “Las mujeres y el mar” del Museo Naval de Donostia-San Sebastián. Uno de los atractivos de esta exposición son las ilustraciones que ha llevado a cabo Elena Odriozola para representar cada uno de los distintos apartados.

Las ilustraciones de Elena Odriozola

El conjunto de ilustraciones llevadas a cabo por Elena Odriozola, premio nacional de Ilustración 2015, potencia el valor artístico que la exposición ya tiene por sí misma. La dibujante donostiarra ha diseñado un personaje femenino para cada uno de los apartados: mujeres con fuerza y personalidad a las que ha eliminado el objeto más representativo. A la mujer exploradora le falta el catalejo que agarra entre sus manos; la pirata enarbola un sable que no vemos; la pescatera sujeta una cesta de pescado invisible sobre su cabeza y la remera se apoya sobre un remo que no podemos ver, mientras que la sirguera arrastra una carga con una cuerda que se ha eliminado. Este elemento invisible, deja un vacío para que sea el visitante quien complete al personaje con el texto explicativo, poniendo algo de su parte e imaginación en este apasionante recorrido a través de las mujeres y el mar.

El conjunto de ilustraciones llevadas a cabo por Elena Odriozola, premio nacional de Ilustración 2015, potencia el valor artístico que la exposición ya tiene por sí misma. La dibujante donostiarra ha diseñado un personaje femenino para cada uno de los apartados: mujeres con fuerza y personalidad a las que ha eliminado el objeto más representativo. A la mujer exploradora le falta el catalejo que agarra entre sus manos; la pirata enarbola un sable que no vemos; la pescatera sujeta una cesta de pescado invisible sobre su cabeza y la remera se apoya sobre un remo que no podemos ver, mientras que la sirguera arrastra una carga con una cuerda que se ha eliminado. Este elemento invisible, deja un vacío para que sea el visitante quien complete al personaje con el texto explicativo, poniendo algo de su parte e imaginación en este apasionante recorrido a través de las mujeres y el mar.

Elena escogió solamente cuatro colores para toda la gama cromática de sus protagonistas: un gris verdoso, un verde azulado (ambos tonos muy vinculados al mar), el marrón oscuro y el color carne. Sus mujeres marinas son fuertes, pero también tienen un aire melancólico y soñador, como se ve en la mujer de blanco asomada a un acantilado, que da la bienvenida a los visitantes a la exposición. En un taller que la ilustradora ofreció en el Untzi Museoa, explicaba su proceso creativo y la técnica empleada (recortes en papel vegetal de las manchas de color y aplicación de la pintura con el dedo).

Es poco frecuente ver la obra de Odriozola como ilustración a exposiciones, como es el caso de “Las mujeres y el mar”. Habitualmente ilustra libros, la mayoría de literatura infantil y juvenil, entre los que destacan grandes clásicos como la Cenicienta o el Frankenstein de Mary Shelley. Cuenta ya con más de 50 publicaciones ilustradas, entre los que también hay libros de poesía (Alfonsina Storni, Pablo Neruda) o de grandes escritores de la literatura universal (Tolstoi).

Elena Odriozola
Ilustración de Elena Odriozola (imagen: Nórdica Libros)