Los habitantes de Herculano leían sus textos escritos en papiro. Los habitantes de Marte, según Ray Bradbury, leían «libros[s] de metal con jeroglíficos en relieve, sobre los que pasaba[n] suavemente la mano como quien toca el arpa.Y del libro, al contacto de los dedos, surgía un canto, una voz antigua y suave que hablaba del tiempo en que el mar bañaba las costas con vapores rojos y los hombres lanzaban al combate nubes de insectos metálicos y arañas eléctricas».
Crónicas marcianas

«Crónicas Marcianas» de Ray Bradbury

Ray Bradbury

Ray Bradbury (foto: www.ultraswank.net)

Ray Bradbury (1920-2012), autor conocido también por «Farenheit 451«, escribió «Crónicas Marcianas» en 1950. Bajo este título sería fácil pensar que nos encontramos ante un libro de ciencia facción. Es cierto que la historia transcurre en Marte, es cierto que habla de un futuro por llegar y es cierto que habla de una realidad en la que los viajes a Marte forman parte de algo casi cotidiano. Sin embargo, Bradbury escoge el planeta rojo y su colonización como excusa para mostrarnos la condición humana. Podríamos estar hablando de la conquista del nuevo mundo o de la colonización de Africa: los terrestres que viajan a Marte esquilman a su población y se instalan como en casa para establecer una sociedad simétrica a aquella de la que provienen. Bradbury crea una distopía en la que los protagonistas no son los marcianos ni un exótico universo extraterrestre (que aparece al comienzo del libro y tímidamente en algún otro capítulo) sino nosotros mismos llevando en plateados cohetes lo peor de la condición humana hasta otro planeta.

El libro se divide en capítulos independientes, instantáneas de episodios en los que vamos viendo poco a poco como la esencia de Marte se va desintegrando. Pero de vez en cuando aparecen vínculos entre los distintos personajes que nos remiten a un hilo conductor y que nos recuerdan a aquellos primeros pobladores, décadas después. Y todas las situaciones, hasta las más dramáticas, nos las presenta teñidas de cierta ironía que hacen de este libro una lectura entretenida y profunda al mismo tiempo.