Instituciones internacionales, entidades locales, leyes de todo tipo, investigadores y un sinfín de agentes culturales llevan décadas intentando clasificar y definir este concepto tan resbaladizo.

Petra

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Hay un patrimonio natural y un patrimonio cultural, y este, a su vez, se subdivide en múltiples categorías. A veces, el patrimonio es tan fácilmente reconocible como en el caso de una catedral gótica; otras, es intangible y no podemos aprehenderlo. Oímos hablar de la conservación del patrimonio y de los ataques que hacen peligrarlo. Unas veces pensamos que es algo que nos pertenece y otras, en cambio, lo vemos como algo totalmente ajeno. Pero lo importante es entender que el patrimonio cultural incluye cualquier manifestación histórica, artística o científica elaborada por la humanidad, que nos pertenece a todos en tanto seres humanos que somos y que, aprendiendo a reconocerlo y amarlo, nos resultará mucho más fácil conservarlo.

Si queremos precisar más podemos recurrir a la definición de la UNESCO, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. Según esta institución, que gestiona la denominación de Patrimonio de la Humanidad, “el patrimonio cultural está conformado por monumentos que tengan un valor universal excepcional desde el punto de vista de la historia, el arte o la ciencia (incluyendo obras arquitectónicas, de escultura o de pintura, y elementos o estructuras arqueológicas), conjuntos cuya arquitectura, unidad e integración en el paisaje tengan este mismo valor universal, y lugares, como los yacimientos arqueológicos, que tengan un valor histórico, estético, etnológico o antropológico“. Como se constata en esta definición, el patrimonio cultural incluye exclusivamente aquellas manifestaciones que son producto de la intervención humana. El resto forma parte del patrimonio natural.

A partir de ahí, el patrimonio cultural puede dividirse en distintas categorías, que facilitan su identificación. Por un lado, podríamos hablar de patrimonio arquitectónico, artístico, arqueológico, documental, etnográfico o industrial, por recoger los más importantes. Cada modalidad de patrimonio tiene una problemática específica que afecta a sus condiciones de conservación. Lo realmente importante es entender que todos los tipos de patrimonio son de gran interés y forman parte de nuestra riqueza cultural.

Otra de las clasificaciones habitualmente utilizadas es la que divide el patrimonio cultural en material e inmaterial. Como su nombre indica, el patrimonio material es todo aquello que es tangible, que podemos tocar: un edificio, una cerámica antigua, una escultura, una pintura… A su vez, el patrimonio material puede clasificarse en patrimonio inmueble (lo que no se puede mover, como una iglesia o un castillo) y el patrimonio mueble (lo que, debido a su tamaño y ubicación, puede transportarse). Frente al material, el patrimonio inmaterial hace referencia a lo intangible: las lenguas, la música, las fiestas, la gastronomía, las costumbres o las tradiciones populares.

Exposición “Ondarea – Patrimonio”

Estas cuestiones son las que se abordan en la exposición “Ondarea-Patrimonio“, organizada por el Ayuntamiento de Irun y expuesta entre el 22 de octubre y el 14 de noviembre de 2021 en el Amaia K. Z. de Irun. El discurso se estructura en torno al concepto de “cadena de valor del patrimonio”, que establece seis fases fundamentales que se interconectan entre sí: identificación (qué es y qué no es patrimonio cultural), documentación (cómo clasificar e inventariar los elementos patrimoniales), valoración (puesta en valor de su riqueza cultural(, conservación (prácticas de conservación y restauración que garanticen la supervivencia del bien cultural), difusión (transmisión del conocimiento a la ciudadanía) y reflexión (cómo podemos conocer, pensar y sentir el patrimonio).

Exposición Patrimonio Irun

Pero el objetivo más importante de la exposición es mostrar a la ciudadanía el interés de la colección patrimonial de Irun. Como colección artística, es la segunda en importancia de Gipuzkoa, pero cuenta también con interesantes ejemplos de patrimonio arquitectónico, industrial o inmaterial. De ahí que se exhiban obras de arte como los cuadros de Darío de Regoyos, Gaspar Montes, Menchu Gal, Carmen Maura o José Luis Noain, pero también porcelanas, objetos etnográficos, libros y hasta una gigante de la comparsa del Irungo Atsegina.

Leyes sobre el patrimonio

Termino este post ofreciendo una recopilación de los acuerdos y convenciones más significativos que afectan a la definición y conservación del patrimonio cultural, ordenados cronológicamente. Algunos de ellos han quedado superados por su antigüedad, pero igualmente es interesante su consulta para entender la evolución del concepto de patrimonio cultural y su protección: